Muy buenos días,
-Honorable Señor José Eduardo Ayú Prado, Procurador General de la Nación
-Doctor Belisario Contreras, Gerente de Proyectos del Comité Interamericano contra el Terrorismo de la Secretaría de Seguridad Multidimencional de la OEA, en representación de la Señora Embajadora Abigail Castro de Pérez, Representante de la OEA en Panamá
-Expertos internacionales invitados
-Representantes del gobierno de Canadá
-Invitados Especiales
-Amigos de los medios de comunicación social
-Damas y Caballeros
Me complace acompañarles en esta ceremonia de apertura del Taller Nacional sobre la Prevención e Investigación ante Incidentes de Seguridad Cibernética, una jornada de capacitación y actualización anhelada por muchos en el país, pero de manera particular por la Autoridad Nacional para la Innovación Gubernamental.
En días pasados leí un interesante artículo periodístico de France Press que destacaba cómo el sistema público de aguas del Estado de Illinois, en los Estados Unidos, había sufrido un ataque cibernético. El reporte indicaba que los perpetradores podrían haber hecho cualquier cosa, porque tuvieron acceso a la estación maestra. Solo se dieron cuenta que los piratas informáticos estaban allí, porque de tanto prender y apagar las bombas de agua, una se incendió. Al investigar, los responsables de la planta descubrieron que “hackers” habían tomado control de la misma.
Seguramente este reportaje no hubiera llamado mi atención, de no ser porque lo leí en días pasados….cuando también nos sonaron acá las alarmas por falta del suministro de agua potable por razones que todos conocemos.
Comienzo con esta referencia, porque este artículo desdibuja con claridad, la magnitud del problema que estamos afrontando como resultado del uso generalizado de las herramientas de la era digital para la operación de nuestras infraestructuras básicas, para conducir el día a día de nuestros negocios y hasta para llevar adelante las más elementales actividades del núcleo social.
Cuando en julio del año 2009, el Presidente Ricardo Martinelli me confió ejecutar la agenda de modernización del Estado, discutimos no solo los profundos cambios requeridos, las inversiones y el calendario programático, sino también los riesgos y los ajustes necesarios a las legislaciones pertinentes, a fin de dotar al proceso del acompañamiento legal necesario para asegurar la sostenibilidad del ambicioso plan.
Y como resultado de esa discusión, surgieron dos planteamientos importantes:
• La necesidad de establecer un Centro de Reporte de Incidentes de Seguridad Cibernética, tarea que por Decreto Ejecutivo No.709 de 26 de septiembre de 2011, publicado en Gaceta Oficial N°26880, fue confiada a nuestra Autoridad, y
• La necesidad de actualizar y fortalecer toda la legislación pertinente sobre el ciber-crimen y el ciber-terrorismo, a fin de dotar a las entidades de seguridad y de persecución del crimen, de los instrumentos para asegurar que este entorno de interoperabilidad informática, no expusiese a panameños y residentes, a empresas e inversionistas, a nuestras infraestructuras básicas y a la gestión gubernamental, a los peligros inherentes al uso generalizado de las nuevas tecnologías.
En esos días discutíamos que la competitividad y modernidad del país requería de un entorno informático seguro. Y el pasar de los días nos ha hecho ver cuán acertados estábamos pero también, cuanto se estaba subvalorando el peligro, la complejidad, escala y dimensión del problema y sobretodo, la fragilidad del sistema.
El cronograma de trabajo adoptado presumió varias tareas precedentes, entre otras, el mejoramiento substancial de la infraestructura de telecomunicaciones del Estado, proyecto que ya estamos terminando de implantar; la creación de un centro de operaciones y servicios de la red, el famoso NOC/SOC; conjuntamente con programa sofisticado de seguridad informática e instancias de contingencias que la AIG, por designio del Gobierno Nacional, viene desarrollando con éxito, junto a las dependencias estatales involucradas.
En abril pasado, en un acto realizado en el Salón Paz de la Presidencia de la República, ante mucho de Ustedes, destacamos que había llegado el momento de enfocarnos en los ciber-delitos, en la actualización de la legislación que los castiga y en la organización de las instancias forenses para su prevención, detección, documentación y persecución.
Desde ese entonces se han dado una sucesión de actividades que nos han posicionado para la exitosa realización de este Taller trascendental sobre la Prevención y Castigo de los delitos que resultan del entorno digital de los tiempos. Tengo que mencionar, entre estas actividades, la conformación del grupo de trabajo para la discusión del borrador del Proyecto de Ley de Delitos Informáticos, a cuyos miembros agradecemos la colaboración desinteresada y enriquecedora que han dado a los instrumentos que esperamos convertir próximamente en Ley de la República.
A fuer de ser responsable, tengo que reconocer también que el avance alcanzado no podría haberse concretado sin la participación de la Organización de los Estados Americanos (OEA), a través de la Secretaría del Comité Interamericano contra el Terrorismo (CICTE). Doña Abigail, a nombre del Organo Ejecutivo, no puedo menos que agradecer este acompañamiento que nos han dado para establecer los mecanismos adecuados de prevención, investigación y castigo de delitos cibernéticos.
Estamos aquí porque queremos establecer estrategias oportunas que permitirán la confianza en un manejo seguro de la información de los asociados y en lo que concierne a la AIG, de manera especial, de la información del Estado. Queremos estar preparados para enfrentar la tendencia que se muestra en el aumento de ataques cibernéticos en todo el mundo y castigar los delitos derivados de esos ataques y de las intrusiones no autorizadas o ilegales, cuando sea el caso.
Quiero destacar y agradecer la presencia de expertos de países amigos que han venido a compartir con nosotros las experiencias de la región, en lo referente al desarrollo de políticas y estrategias en seguridad cibernética, las amenazas emergentes y la evolución de los Equipos de Respuesta a Incidentes de Seguridad Cibernética. Exhorto a los participantes a que aprovechemos al máximo la oportunidad que nos brinda este Taller para perfeccionar las estrategias que estamos desarrollando en Panamá para proteger nuestra información digital.
Un reporte de una consultora internacional señalaba en meses pasados que Panamá está siendo utilizada como país de tránsito para muchas de las intrusiones cibernéticas no autorizadas. El reporte nos ubicaba entre los 10 países más expuestos.
Con este Taller, estamos enviando al mundo un mensaje claro:
En Panamá perseguimos el crimen en todas sus formas y nos estamos preparando para perseguir el delito informático con especial apasionamiento e intensidad.
Señor Procurador, no puedo terminar sin reconocer su permanente respaldo a esta jornada contra el cibercrimen y el ciberterrorismo y agradecerle a Usted y al Ministerio Público por ser anfitriones de lo que ya se proyecta como un encuentro muy productivo y provechoso.
A los amigos visitantes, muchas gracias y bienvenidos.
Y a todos Ustedes muchos éxitos y buenos días.
Gracias!
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